1.Nunca llegues a una fiesta o reunión con hambre: Según la psicóloga Carol Goldberg si planificas con tiempo, tendrás mayor fuerza de voluntad para evitar la tentación. Es decir, si sabes que irás a una fiesta donde habrá un sinfín de comida, lo mejor que puedes hacer es comerte una merienda alta en proteínas y baja en grasa antes de llegar al evento. Al hacer esto te verás menos tentado a comerte la entera tabla de quesos y boquitas de la fiesta
2. Enfócate en algo más: Muchos de nosotros solemos olvidar que el mayor propósito de una celebración no siempre es la comida. Diviértete con tus amigos, charla con ellos, ponte a bailar y disfruta del momento, mantente alejado del buffet, ojos que no ven estomago que no siente taaanta hambre.
3.Come despacio: Entre más despacio comas, te sentirás satisfecho. No olvides que toma cierto tiempo para que tu cuerpo procese el hecho que ya estás lleno, así que si saboreas y masticas bien cada bocado seguro terminarás consumiendo menos cantidad de alimentos.
4.Opta por proteína: Cuando ya llegue el momento de comer, sírvete mayores porciones de proteína que de carbohidratos. En otras palabras, es mejor que comas una buena ración de pavo y no tanto puré o pan.
5.Sírvete en platos más pequeños: En vez de servirte en un plato grande, opta por comer en un plato pequeño, al llenarlo de comida tu cerebro pensará que has comido bastante, cuando en realidad no es así.
6.Ojo con el alcohol: Además de contar un alto contenido de calorías vacías, el pasarse de copas puede hacer que se le haga más difícil a tu cuerpo quemar grasa. Los expertos recomiendan un vodka con soda y limón si vas a tomar, elegir esto en vez de un cóctel cargado de azúcar te ayudará mas de lo que crees. Lo sentimos mucho rompopo, sabemos que eres delicioso pero engordas mucho.
7.Se selectivo con los postres: Si los postres no son lo tuyo, tienes una gran ventaja a tu favor. Sin embargo si eres de esas personas que se desviven por el dulce, lo más recomendable es que seas selectivo. Elige una pequeña ración de tu postre favorito y disfrútalo al máximo, si puedes compártelo con un amigo o familiar para cortar las calorías del postre en mitad.
8.Comparte con tus invitados: Si resulta que tú eres el anfitrión de la fiesta, evita quedarte con comida de más y comparte lo que queda de las boquitas y el banquete con tus invitados. Cuando se vayan, prepárales un buen plato con un poquito de todo lo que quedó para que lo puedan disfrutar el día siguiente en casa, de esta forma no tendrás unos 20 pastelillos extra la mañana siguiente que fácil te devoras en una sentada solo porque están tentándote.
9.Ejercita el auto control: Sabemos que no es fácil evitar la tentación, sobre todo cuando tu tía la que le encanta cocinar piensa que la mejor forma de consentirte es dándote más de comer que un chanchito de engorde. Pero lo mejor que puedes hacer en ese caso es realmente imaginar lo difícil que resultará bajar unas 20 libras de más cuando llegue enero, todo porque en diciembre comiste como si el mundo estaba por acabarse. Cuando te ofrezcan más y más comida (Gracias tia, sabemos que nos quieres) lo mejor que puedes hacer es agradecerles y decirles que has probado de todo y que por los momentos estás tomando un descanso porque te sientes lleno.
10.Crea una tradición familiar que involucre una actividad física: Si, estamos consientes que las fiestas de Navidad son para disfrutar pero no seas de esas personas que solo están felices cuando están sentados comiendo de todo un poco. Salgan a caminar, vayan a ver las luces navideñas, jueguen con los niños un escondite, no olviden dar una buena bailada con el abuelo o la abuela. Todo esto te ayudará a quemar calorías mientras te diviertes.